Una experiencia con altibajos

Las vistas desde la habitación son increíbles, así como el desayuno que ofrece el restaurante. Sin embargo, el personal de recepción fue poco amable y la información proporcionada no fue precisa. Recomiendo verificar todo lo que necesiten antes de llegar.

La ubicación es perfecta para disfrutar del paisaje. Recomiendo llevar snacks, ya que las opciones de comida son limitadas y algo costosas.

Disfrutamos de una vista espectacular desde nuestra habitación, y aunque la cena fue fija, la calidad de la comida realmente nos sorprendió. Definitivamente, elegiría este lugar de nuevo.

Las vistas desde nuestra habitación eran impresionantes, y tuvimos la oportunidad de realizar un tour al mirador Oteros, donde disfrutamos de la belleza del río Oteros. visitamos la cueva que habita una familia tarahumara, fue una experiencia única con mi familia y socio.

Mi mujer dice que el personal debería ser más amable y atento a las necesidades de las familias. Además, el servicio de limpieza no siempre cumplió con los tiempos establecidos.

la impresionante vista desde la terraza del restaurante

la magnífica vista, el espacio acogedor

el precio elevado

conoce la increíble vista y la acogedora zona de bar donde desconectar del estrés

Las vistas son realmente impresionantes. Todo fue fácil, desde el check-in hasta disfrutar de un ambiente relajado. El personal fue siempre muy servicial. Sin embargo, la comida era un poco cara.

Tuvimos una gran experiencia durante nuestro viaje con amigos. Realizamos un tour donde visitamos el mirador Oteros y disfrutamos de la impresionante vista del río Oteros. Además, conocimos la cueva Catalina, donde vive una familia tarahumara. La ubicación es perfecta para explorar el centro y probar la comida local, ¡altamente recomendado!

Sin embargo, tuvimos un pequeño inconveniente con el servicio de limpieza, ya que no llegaron a tiempo a nuestra habitación en una ocasión.

La comida en el restaurante es un festín! Los platos recién preparados son un deleite para el paladar, especialmente el desayuno que me dejó impactado. Además, la vista desde la habitación y el ambiente del hotel son dignos de un postcard, creando una experiencia memorable.

Aunque todo brilló, debo mencionar que el hotel tiene una fijación con la música en los espacios comunes, que se escucha hasta en el balcón. A veces solo quería disfrutar del silencio del cañón, pero la melodía de fondo no me lo permitía.

Las vistas desde la habitación son espectaculares, y los alimentos del restaurante son muy buenos, especialmente el desayuno. El personal del restaurante es atento y hace un buen trabajo.

El servicio de recepción es deficiente, con personal poco amable y falta de información veraz sobre servicios. Además, el tiempo de espera para el check-in fue excesivo y no se justificó con el costo de la estancia.

La vista y el bar están bien, pero el aparcamiento es complicado y escaso.

vistas impactantes pero servicio mejorable

Las vistas desde la habitación son impresionantes, brindando un espectáculo que realmente destaca. Además, el desayuno en el restaurante fue delicioso, superando mis expectativas con opciones frescas y variadas. El personal del restaurante fue muy atento y servicial durante toda nuestra comida.

El tiempo de espera en el check-in fue prolongado y un tanto frustrante.

Habitación cómoda, check-in rápido y personal amable. La ubicación ideal para disfrutar del paisaje y recorrer la zona. Pero ojo, la comida es un poco cara y el wifi hay que pagarlo. Aún así, la pasamos bien con mi familia.

La ubicación es inigualable, con vistas impresionantes del cañón y un ambiente acogedor. Disfruté del desayuno bufé variado y delicioso, que realmente comenzó mis días de manera perfecta.

La comida es un poco cara y hay que pagar wifi.